Si dejas de comprar ropa barata, los pobres no tendrán trabajo

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agosto 4, 2011
Costureras en una fábrica Este argumento sale en muchas de mis charlas sobre un consumo responsable. Defiendo la reducción del consumo, la compra consciente y basada en criterios éticos y ecológicos. Para mi, cada euro es un voto y no quiero apoyar a empresas que explotan a sus trabajadores para poder ofrecerme un vaquero a precio de un menú del día. Y entonces alguien presenta el argumento “pobreza”: Si nosotros no compramos la ropa tan barata, estamos destruyendo puestos de trabajo en la India, Sri Lanka y China. Las personas que viven en estos países no tienen otra alternativa, así que si no les apoyamos comprando los productos, perderán su trabajo y morirán de hambre. Además, los costes de vida son más bajos en los países, así que no podemos compararlo. Es un argumento aparentemente sólido. Además implica que al cambiar nuestros hábitos estemos perjudicando otras personas y por lo tanto es más fácil no hacer nada. Resulta que los argumentos que refuerzan lo que ya hacemos se aceptan con más facilidad. Al final, los cambios duelen. No obstante, es importante analizar el contenido de estos argumentos un poco más a fondo.

Mito 1: Los costes de vida son más bajos en los países de producción

La afirmación de que en otros países los costes de vida son más bajos es verdad. Sin embargo, es solo cierto por una parte. Por otra parte depende de si el salario que reciben los trabajadores cubra sus necesidades. Por ejemplo, se estima que en Bangalore una familia de tamaño medio necesita 4.365 rupias (80 Euros) para cubrir las necesidades básicas. Si las fábricas de confección de ropa tan solo pagan 2.418 rupias (42 Euros) por mes, entonces la situación de esta trabajadora (en su mayoría mujeres) es igual que la de un becario aquí que intenta sobrevivir con 600€ al mes en Barcelona. Claro que la mitad de lo que necesitas es mejor que nada, pero no sería todavía mejor que te pagarían un salario digno?

Mito 2: Si no compramos esa ropa, entonces la gente que la produce se queda sin trabajo

Es interesante saber que las empresas justifican la explotación de los trabajadores con el argumento de que “la gente no nos compraría la ropa si la vendiéramos a precios más altos”. Significa que desde el punto de vista de las empresas, en realidad TU eres responsable. TU quieres comprar vaqueros a 10 Euros, por lo tanto toda la cadena de producción tiene que ajustarse a ello, y es por eso que ellos tienen que aumentar la presión sobre sus proveedores para que bajen todavía más los costes de producción

La realidad: Tus compras son las estadísticas que marcan tendencias

Las decisiones de las empresas se suelen tomar basándose en el comportamiento de los compradores. Si de repente a todos les gusta el algodón orgánico, entonces también H&M incorporará una linea de tejidos ecológicos para ver si funciona, y si lo venden muy bien, aumentarán el porcentaje. Si cada vez más gente pide en las grandes superficies ropa de comercio justo, es posible que a medio plazo el centro incorpore marcas alternativas a sus ofertas para ver si funciona. Todos estos cambios se producen basándose en las demandas de los consumidores. Y si más y más gente critica el sistema actual y se opone activamente , las grandes empresas revisarán antes sus políticas para adecuarse a las nuevas demandas. Recuerda que con cada compra apruebas no solo el producto sino también sus materiales y la forma en la que fue producido. Para saber más sobre las condiciones de trabajo en el sector, te recomiendo el informe “Pasen por Caja”  (descarga gratuita) de la Campaña Ropa Limpia. — Imagen: Ed-meister / flickr 

3 Responses

  1. […] … que la costurera que ha hecho este vestido recibe un salario digno. […]

  2. […] de producción. ¿Hasta qué punto es sostenible un vestido de algodón ecológico fabricado bajo condiciones deplorables en […]

  3. Lulila dice:

    El segundo argumento es cierto… yo he empezado con el Proyecto 333 y he alentado a mis amigas… Tras explicarle todas estas cosas, me han dicho que demasiado cara es la ropa de Zara, así que sí que es cierto que si esa ropa fuese tan cara, no la compraria, a no ser que no hubiese otra alternativa más barata… y entonces comprarían menos.. El mundo se divide entre la gente que compra muchas cosas baratas, o los que compran poquitas y caras (si hablamos de clase media, claro). Al final con que una empresa haga eso, ya todas van a hacer lo mismo, porque si no, no son lo bastante competentes. Por deciros un ejemplo, no sé cómo estará el grupo Cortefiel en estos temas últimamente, pero muchas de mis amigas se niegan a comprar en Springfield, porque los precios son sensiblemente más elevados que por ejemplo en Blanco. Y yo pienso que este grupo representa a bastante porcentaje de población joven, que al final somos un grupo de los más consumistas en lo que a moda se refiere, por aquello de que la apariencia es lo que cuenta para muchos de ellos.

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